Hace unas semanas mi madre comenzó a arreglar el jardín de casa, como buen otoño y antes que comience el invierno, empezó con la poda.Las rosas, arbustos y el arbolito fueron las victimas de la tijera que quitaba cuidadosamente alguna de sus ramas.
En lo personal nunca me había interesado demasiado de esta particular actividad de la jardinería, hasta que le pregunte a mi madre cual era el motivo de la poda, me dijo que podar solo ayuda al árbol o arbusto, puesto que lo ayuda en su crecimiento, haciéndolo más fuerte, y en el caso de las rosas, crecen mas lindas y con mas botones, lo que al final termina siendo una rosa.
Fue inevitable no pensar en como Dios trabaja con nosotros,¿Dios nos poda? Creo que si. Se acerca el invierno en nuestras vidas y como un buen jardinero hace cortes en las ramas que precisan ser arrancadas, duele mientras saca cada una de esas ramas, pero al fin del día y con la primavera, termina siendo un árbol grande, con sus ramas hacia el cielo ...
1 comentario:
Amigo... No había leído esto, pero de verdad me pareció muy cierto lo que escribiste. Dios nos poda y aunque duela, el crecimiento es sano y direccionado por él. Mi oración es que Dios te haga crecer mucho más en todo sentido. No intentes auto-podarte; él sabe mejor qué áreas de tu vida deben ser tratadas =)
Un fuerte abrazo!
David
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